Me he resignado al invierno

Esto de trabajar en un bar está muy bien para conocer gente, para beber gratis, para que te apunten en la guest list de las discotecas y para escribir un libro con las historias que te cuentan. Pero cuando en Barcelona se celebra un festival de la talla del Primavera Club, hermano pequeño del Primavera Sound, a una no le hace ni p*** gracia trabajar como camarera.


Pues sí, Greta, yo hubiese vendido mi alma al diablo por escuchar (y ver, para qué nos vamos a engañar) al maravilloso Devendra Banhart. Y pedirle "please destroy me" al ritmo de First song for B. O también haber disfrutado de las melodías de Cass McCombs. Todo muy folkie, porque también está bien salir de la rutina electropopera que vivo cada noche en el bar. Ay, esa letra de “Dream come true girl”, que enamoraría a cualquier chica, y no las guarradas que he tenido que aguantar este finde por parte de varios borrachos. O también escuchar “Automatic” surgir de la delicada voz de Yuri Mendez, más conocido como Pájaro Sunrise. Sentir la felicidad correr por mis venas a ritmo de Port O’brien o descargar adrenalina bailando con Mujeres. Y cantar a viva voz “pudo ser un amor del montón, pero todo el montón era mío” del gran Sr. Chinarro. O pedir una y otra vez más guerra por parte de Standstill.

En fin, hubiese sido un fin de semana apoteósico y lleno de emociones, pero una tiene que comer, y esta vez no pudo ser. Pero ya te digo Greta, que el Primavera Sound no me lo quita nadie, eso seguro.


CHLOÉ

2 comentarios:

  1. por cierto.. no sé exactamente qué cantante es el de la foto.. pero parece interesante, parece triste? dile que se venga al cuarto jocosil in badalona's guettoooo ouuu yeah

    ResponderEliminar
  2. Es Devendra Banhart...sí, es un tipo de los que llamamos triste/antiguo...escúchalo...es mezcla de varias cosas pq el tío tiene una vida así de mestizaje..te gustará

    ResponderEliminar